En general, ésta es una marca asequible y que me gusta, así que me puse contentísima cuando una amiga me regaló una minitalla (con un contenido de 20 ml.) de la crema Toleriane Ultra.
Lo primero que me gustó es el envase: mi minitalla era una réplica exacta del tamaño real de venta. Desde mi punto de vista, es una presentación innovadora ya que, aparte de su dosificador incorporado, presenta una forma estudiada para evitar cualquier contaminación del producto proveniente del exterior. Vamos, que es hermético 100%. Por si eso fuera poco, el interior de la "botella" contiene una bolsa retráctil que permite que se acabe hasta la última gota de crema con lo que el desperdicio de producto es nulo. Lástima que este packaging no permita comprobar qué cantidad de producto queda en su interior.
Por otra parte, la crema tiene una textura idónea para mi piel: no contiene alcohol, parabenos, conservantes, colorantes ni lanolina. Además, es no comedogénica y bastante ligera, por lo que se extiende y se absorbe con rapidez. Tras su aplicación, mi piel queda suave y con sensación de comodidad, pero sin la incómoda sensación de grasa que dejan algunas hidratantes.
El tamaño real de venta es de 40 mL. y su precio es de alrededor de 18 euros en farmacias y parafarmacias. Razonable si se tiene en cuenta el precio que se gastan las cremas "de calidad".
En principio, es una crema apta para todo tipo de pieles y éste me parece su principal defecto, pues creo que estas cremas que valen "para todo el mundo", no son tan eficaces para todas las pieles como las específicas para pieles grasas, secas, etc... Suerte que mi piel todoterreno no suele quejarse con los potingues que le pongo... No obstante, a pesar de que está formulada con un mínimo de perfumes, su olor, aunque leve, me resulta un tanto desagradable. Claro que, soy muy crítica y aséptica en este sentido y prefiero los productos faciales que no tienen ningún olor.
Conclusión: Una buena crema para la época invernal en la que la piel está más reactiva y sensible a los factores ambientales, aunque no me va su olor y preferiría que hubiese tantas variedades de ella como principales tipos de piel.
En principio, es una crema apta para todo tipo de pieles y éste me parece su principal defecto, pues creo que estas cremas que valen "para todo el mundo", no son tan eficaces para todas las pieles como las específicas para pieles grasas, secas, etc... Suerte que mi piel todoterreno no suele quejarse con los potingues que le pongo... No obstante, a pesar de que está formulada con un mínimo de perfumes, su olor, aunque leve, me resulta un tanto desagradable. Claro que, soy muy crítica y aséptica en este sentido y prefiero los productos faciales que no tienen ningún olor.
Conclusión: Una buena crema para la época invernal en la que la piel está más reactiva y sensible a los factores ambientales, aunque no me va su olor y preferiría que hubiese tantas variedades de ella como principales tipos de piel.
Ay, a mí me dejó una muestra Itaca pero aún no la he probado. Mi madre sí, que ella se quedó con otra.
ResponderEliminar